Elijo constantemente el cambio. Mutar hacia formas más coloridas. Tambaleando dulcemente al borde del abismo.
Lo inmutable, no merece ser amado. Las viejas estructuras pueden quedarse dormitando en libros acarosos. Tienen que ser conocidas, pero sólo para poder romperlas y crecer con sus cenizas. Tejer nuevas redes, y volverlas a quebrar una y otra vez. Romper con las estúpidas normas establecidas. Deformar los moldes rígidos existentes. Traspasar tus propios límites. Saltar tras los decorados y ver más allá. Animarse a más, es un desafío más que interesante. Es nuestra forma de vida. ¿Pero te animas? ¿Te animas a no ser vos?
¿Te animas a descubrir que todo lo que siempre creíste no es verdad?
¿No te da miedo saber que la verdad no existe? Que la moral es un diccionario inventado por un viejo borracho? Que las normas están hechas para romperlas? Claro que no es fácil. No es sencillo ir contra nosotros mismos. Pero es esencial. Es un desafío excitante. Es genuino. A ninguno le gusta que le digan que lo que piensa está mal, o bien. Pero ni por casualidad soportaría que le digan que no está ni bien ni mal, o que está bien y mal. Porque roza la locura. Porque la locura nos rodea y nos contiene. No queremos aceptarla pero es íntimamente nuestra. Es nuestra eterna compañera. Y gracias a ella, hacemos cosas, producimos cambios, damos sentido a esta vida. Locura y cambio juegan juntas en la delantera.
Porque la escena requiere de cambios. La historia debe progresar, e inevitablemente el drama debe existir.
Y lo que hoy pienso, mañana ya no lo compartiré y me estaré riendo de tu psicología. Tus temores alimentan mi placer. No es que mis fortalezas sean tus debilidades. Me conmueven y me agitan.
Espero verte. Tal vez saltando o jugando, bailando y bebiendo. Embriagándonos hasta el amanecer. Como siempre lo hicimos. Bailando esa danza sensual de los corazones exaltados.
Se que te desvelan los mismos sueños, y que te inquieta esta locura. Se que podes imaginar lo que no fue imaginado aún. Vivo esperando un día más. Sólo un día. Para sentirme vivo y conmoverte. Para que me conmuevas con tus locuras. Para darte arte.
Lo inmutable, no merece ser amado. Las viejas estructuras pueden quedarse dormitando en libros acarosos. Tienen que ser conocidas, pero sólo para poder romperlas y crecer con sus cenizas. Tejer nuevas redes, y volverlas a quebrar una y otra vez. Romper con las estúpidas normas establecidas. Deformar los moldes rígidos existentes. Traspasar tus propios límites. Saltar tras los decorados y ver más allá. Animarse a más, es un desafío más que interesante. Es nuestra forma de vida. ¿Pero te animas? ¿Te animas a no ser vos?
¿Te animas a descubrir que todo lo que siempre creíste no es verdad?
¿No te da miedo saber que la verdad no existe? Que la moral es un diccionario inventado por un viejo borracho? Que las normas están hechas para romperlas? Claro que no es fácil. No es sencillo ir contra nosotros mismos. Pero es esencial. Es un desafío excitante. Es genuino. A ninguno le gusta que le digan que lo que piensa está mal, o bien. Pero ni por casualidad soportaría que le digan que no está ni bien ni mal, o que está bien y mal. Porque roza la locura. Porque la locura nos rodea y nos contiene. No queremos aceptarla pero es íntimamente nuestra. Es nuestra eterna compañera. Y gracias a ella, hacemos cosas, producimos cambios, damos sentido a esta vida. Locura y cambio juegan juntas en la delantera.
Porque la escena requiere de cambios. La historia debe progresar, e inevitablemente el drama debe existir.
Y lo que hoy pienso, mañana ya no lo compartiré y me estaré riendo de tu psicología. Tus temores alimentan mi placer. No es que mis fortalezas sean tus debilidades. Me conmueven y me agitan.
Espero verte. Tal vez saltando o jugando, bailando y bebiendo. Embriagándonos hasta el amanecer. Como siempre lo hicimos. Bailando esa danza sensual de los corazones exaltados.
Se que te desvelan los mismos sueños, y que te inquieta esta locura. Se que podes imaginar lo que no fue imaginado aún. Vivo esperando un día más. Sólo un día. Para sentirme vivo y conmoverte. Para que me conmuevas con tus locuras. Para darte arte.
Guaaauuu……sin palabras….
ResponderEliminarReite de mi psicología pero me vienen a la cabeza cuando leo tu arte es que ... veo y escucho el canto de un jilguero un puma dando un fuerte rugido …ha y me falta lo mejor! La locura de la HIENA
Uff ..¿Sabes que me acordé? Nada mas y nada menos que el tema La Hiena, de los Pericos! La letra es justa para esto!!
Las situaciones te hacen pasar por cada uno de esos animales...
Pero ni dudo, que el leon ya no es el rey de la selva...
Vos sí que sos un loko lindo Adán ! Adhiero totalmente. El cambio es vida. Mutación. Crecimiento. Destrucción creativa.
ResponderEliminarEsto que vos llamas "locura" yo lo veo mas como rebeldía. Una insurrección de la mente a los corsets que nos imponen la sociedad, la crianza, la familia, etc. Hay que animarse. Nadie dice que sea sencillo, pero está bueno. Yo me considero un encorsetado mas, pero trato de escaparme a la aventura de liberar la mente a veces.
En definitiva, ¿qué es la verdad?. Existe?
Existen las emociones. Los sentimientos. La amistad. El amor.
Así como algunos "salen del placard", nosotros salgamos del corset !